Monasterio de los Jerónimos de Belém
EUROPA,  Lisboa,  Portugal

Monasterio de los Jerónimos de Lisboa

En la capital de Portugal se pueden visitar monumentos y museos espectaculares, pero si hay uno que destaque por su riqueza arquitectónica y grandeza es el Monasterio de los Jerónimos (Mosteiro dos Jerónimos). Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1983.

Este monumento es uno de los más visitados de Portugal por varios motivos: albergar importantes obra de arte religioso, su arquitectura manuelina y por ser un símbolo de la época dorada de los descubrimientos realizados por los exploradores portugueses.

El Monasterio de los Jerónimos forma junto con la Torre de Belém y el Castillo de San Jorge la gran triada de los monumentos de Lisboa. Portugal tuvo una gran importancia en el comercio marítimo durante el siglo XVI, y la torre-fortaleza protegía el monasterio y la ciudad de las naves enemigas que entraban por el río Tajo.

Entrada Monasterio de los Jerónimos
Entrada Monasterio de los Jerónimos

Precio y horario del Monasterio de los Jerónimos de Lisboa

El Monasterio de los Jerónimos se compone de dos visitas independientes, el claustro y la iglesia. La fila de la izquierda es para acceder al monasterio y la derecha para entrar a la iglesia. El claustro es de pago, aunque está incluido en la tarjeta turística Lisboa Card, mientras que la visita a la iglesia es gratuita.

El precio para visitar el claustro del monasterio y las diferentes estancias es de 12€/persona, y la podéis comprar en su web oficial, sin embargo esto no os exime de esperar las largas colas. Para entrar sin esperar cola podéis reservar algún Tour.

El horario del monasterio es de 10:00 a 17:30 de octubre a abril. De mayo a septiembre, de 10:00 a 18:30. Al final del artículo indicamos, según nuestra experiencia, la mejor hora para visitarlo y cómo llegar hasta allí.

Lisboa Card
Entrada incluida al Monasterio con la Lisboa Card

Historia del Monasterio de los Jerónimos de Belém

Antes de su construcción, el rey Manuel I de Portugal le encargó al marinero Vasco da Gama que encontrase una ruta alternativa para llegar a las indias, bordeando el Cabo de Buena Esperanza. La noche antes, Vasco da Gama y varios marineros pasaron la noche rezando en la ermita de Restelo. Esta ermita fue levantada por Infante Dom Henrique (Enrique el Navegante) en el siglo XIV.

Para conmemorar el regreso del navegante, el rey ordenó la construcción del monasterio en el lugar de la ermita, como símbolo de agradecimiento a la Virgen María por la protección ofrecida durante la expedición. Su fachada tiene más de 300 metros de largo y su entrada principal es denominada Portada del Mediodía.

Los monjes jerónimos ocuparon el monasterio hasta el siglo XIX, motivo por el que adquirió ese nombre. Durante los siglos posteriores el Mosteiro dos Jerónimos fue un importante centro religioso y espiritual, donde los marineros llegaban para orar antes de sus viajes. Tanta fue su relevancia que aquí se enterraron importantes figuras portuguesas, como reyes y exploradores.

En 1755, un terremoto de elevada magnitud causó importantes daños en el monasterio, quedando prácticamente en ruinas. A pesar de que tuvo que ser restaurado en su mayoría, y durante varios años, la estructura original se ha conservado.

Historia del Monasterio de los Jerónimos de Belém
Historia del Monasterio de los Jerónimos de Belém

Claustro del Monasterio de los Jerónimos de Lisboa

La visita principal del monasterio es su claustro, de estilo manuelino. Este estilo es una variante del gótico tardío con elementos renacentistas y náuticos. Fue diseñado por el arquitecto Diogo de Boitaca y luego completado por otros arquitectos, incluyendo João de Castilho. Las columnas de doble torsión y los arcos son un auténtico espectáculo visual.

Desde la parte superior se tiene acceso al coro alto de la iglesia, diseñado por Torralva en el siglo XVI. Otra de las estancias que se puede visitar es el refectorio (se le llama así al comedor de los monjes), con paredes decoradas con azulejos del siglo XVIII.

Por último, en la sala capitular destaca la exuberante tumba de Alexandre Herculano, un importante poeta e historiador portugués que fue el primer alcalde de Belém.

Claustro del Monasterio de los Jerónimos de Lisboa
Claustro del Monasterio de los Jerónimos de Lisboa

Iglesia de Santa María de Belém

En la arquitectura de su fachada principal se encuentran numerosos motivos marítimos, como cuerdas y conchas, característicos del estilo manuelino. Una de las figuras más destacadas del pórtico es la de Enrique el Navegante, situada en el centro, bajo la Virgen de Belém.

La espectacular iglesia del monasterio está compuesta en una sola nave, que presenta una bóveda de crucería estrellada y dispuesta a través de 6 impresionantes columnas. En el retablo mayor se encuentran importantes pinturas del artista Lourenço de Salzedo y un sagrario del siglo XVII.

Las tumbas apoyadas sobre los elefantes esculpidos pertenecen al rey Manuel I y Juan III, así como sus respectivas mujeres, María de Aragón y Catalina de Austria. Otros mausoleos importantes de la iglesia son el de Vasco da Gama y del rey Sebastián I.

Iglesia de Santa María de Belém
Iglesia de Santa María de Belém

Recomendaciones para su visita

El Monasterio de los Jerónimos está ubicado en el barrio de Belém, a las afueras del centro histórico de Lisboa. Os dejamos varias opciones para llegar desde el centro de Lisboa:

  • La mejor opción para llegar hasta el monasterio desde el centro de Lisboa es coger el autobús 728 junto a la plaza del Comercio (Praça do Comércio).
  • Otra opción es coger el tren en la estación Cais do Sodré en dirección Cascais y bajarse frente al Museu Nacional dos Coches.
  • Si váis en coche, hay calles muy cercanas al monasterio como João Bastos o R. Martins Barata (y las de alrededor), en la que es posible aparcar sin tener la obligación de pagar.

Importante indicar también que con la Lisboa Card podéis coger todo el transporte público de manera ilimitada durante el tiempo que esté activa.

Con respecto a la hora de entrada, lo intentamos durante un par de días sin éxito a primeras horas de la mañana. Las filas “infernales” que se forman para entrar al claustro pueden durante entre 60/90 minutos, lo cual nos parece una locura. Hay que añadir además que no hay sombra, por lo que si hace calor es insoportable.

Al final decidimos visitar primero Lisboa y a última hora acercarnos a ver si era posible no tener que esperar mucho tiempo la fila, y así fue. Llegamos una hora y media antes de que cerrara y no había nadie esperando para entrar. Sin duda un dato que nos hubiera gustado conocer antes de ir.

¡Esperamos que este artículo os sea útil para vuestra visita al Monasterio de los Jerónimos de Lisboa!

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